Muestra "Desenredar la madeja"

La exposición de tapices los toma como "objetos estéticos-artísticos, de reconstrucción, de memoria, a través de una técnica ancestral de narración de un relato real o imaginario,  como haciendo nudos con la memoria y el territorio, desovillando distintos modos de coser la vida al arte".

 
"Cada puntada apareció para ocupar el lugar de palabras que habían quedado huecas cuando todo parecía enredado. Esas puntadas intuitivas se fueron nutriendo de la fuerza de hermanas, madres y abuelas de Nuestra Tierra que hablaron y hablan a través de los hilos y de las telas".

"Nunca había cosido un botón y mucho menos bordado un tapiz. Sin embargo, logré decir lo que sentía y encauzar emociones profundas gracias a la magia que llega a través de las ancestras".

"La arpillera me ayudó a encontrar fuerza en lo pequeño y delicadeza en los grandes objetivos y con ese aprendizaje comparto estos bordados junto a otras mujeres a las que agradezco, admiro y me inspiran".